Si tienes interés en invertir, es determinante definir qué tipo de inversión se adapta a tu personalidad y necesidades, es decir, descubrir qué tipo de inversionista eres. De esta manera sabrás que riesgo estás dispuesto a tomar y evitarás sorpresas desagradables en caso de complicación de los mercados de valores.
El primer paso para invertir es, obviamente, ahorrar, y una vez que cuentes con una cantidad disponible, decidir cuáles son los mejores instrumentos de inversión para ti.
Para ubicarte dentro de un perfil de inversionista es necesario conocer a fondo tu tolerancia al riesgo, el plazo que quieres para tu inversión y el total de capital del que dispones.
Un asesor financiero o un administrador de fondos pueden apoyarte en esta tarea.
Conociendo tu personalidad financiera
Para ubicar mejor qué tipo de inversionista es una persona, se requiere determinar:
Educación y experiencia
Nivel de estudios, edad, ocupación, actividad profesión actual.
Instrumentos financieros en los que ha invertido.
Instrumentos de inversión que conoce.
Nivel general de conocimientos financieros.
Situación y capacidad financiera
Origen y porcentaje aproximado de los ingresos que destinará a la inversión.
Porcentaje del monto de la inversión, en relación con su patrimonio.
Necesidades de liquidez de su patrimonio.
Capacidad para ahorrar respecto al ingreso total.
Objetivos de inversión
Definir propósito de la inversión.
Duración prevista de la inversión.
Limitantes y restricciones particulares para la inversión, por voluntad del inversionista.
Al acudir con un asesor, éste te preguntará sobre el tipo de cuenta que deseas abrir, el monto de capital del que dispones y si te interesa contar con algo de liquidez para gastos como vacaciones o emergencias.
Necesitará saber tu nivel de conocimientos financieros y si quieres administrar tu cartera o parte de ella.
Plazo de inversión
Dependiendo de tus objetivos, debes decidir por cuánto tiempo deseas invertir la cantidad total, o si quieres hacer una combinación de inversiones a diferentes plazos con distintos propósitos.
Situación financiera actual
Recabar esta información no es por intromisión en tus finanzas personales. Saber si tus gastos exceden tus ingresos o si tus ingresos exceden tus gastos, ayuda al asesor a determinar si cuentas con capacidad de ahorro y si puedes comprometer tu dinero en inversiones a plazos cortos o largos.
Metas de inversión
Una vez que comprendas la relación entre los rendimientos de las inversiones y los riesgos en que se incurren, podrás decidirte por instrumentos que no fluctúen en valor; si estás dispuesto a aceptar mayor riesgo a cambio de un rendimiento más elevado o, por el contrario, si prefieres inversiones estables a costa del rendimiento potencial.
Experiencia
Es importante que tu asesor financiero sepa si has invertido antes en fondos de inversión o en la Bolsa de Valores y conocer tu sensación de comodidad o vulnerabilidad ante las fluctuaciones propias de los mercados.
Tolerancia al riesgo
El asesor te preguntará el porcentaje de disminución de valor de tus inversiones que estarías dispuesto a aceptar temporalmente en caso de grandes turbulencias financieras. A mayor tolerancia, tu cartera tendría más exposición al riesgo… y mayores rendimientos potenciales. Si tu incomodidad es significativa, será mejor que optes por una cartera más inclinada hacia las inversiones conservadoras, con menor rendimiento y a más largo plazo.
En cualquier caso, la diversificación de tu cartera de inversiones reducirá tu exposición al riesgo y, a la larga, significará más estabilidad para tu capital.
No olvides, sin embargo, que tu perfil de inversionista puede mutar con el tiempo, pues si cambian tus circunstancias o tus objetivos financieros querrás adaptar la manera en que administras tu dinero.
Es posible que tus conocimientos financieros sean suficientes para que sepas cómo operan los diferentes tipos de inversión, pero, ante la volatilidad de los mercados, lo mejor es que te acerques a un profesional que esté al tanto de los movimientos cotidianos y te oriente mejor acerca del destino de tu dinero.
Identifica tu perfil
En cualquier clasificación, por un lado, estará el inversionista que no desea correr ningún riesgo y, en el otro extremo, el que está dispuesto a arriesgarse considerablemente buscando rendimientos potencialmente mayores.
Conservador
Busca proteger su ahorro y está dispuesto a asumir riesgos o pérdidas mínimas. Es probable que requiera disponer de una parte de su capital para gastos cotidianos. Sus conocimientos financieros son básicos, por lo que requiere sugerencias de los expertos.
Moderado
Está dispuesto a arriesgarse de manera limitada, con pérdidas no muy graves. Desea rendimientos un tanto superiores a la tasa libre de riesgo (Cetes). Podría requerir de una parte de su capital para gastos corrientes.
Patrimonial
Es una persona que puede asumir riesgos en sus inversiones y cierto nivel de pérdidas a mediano plazo, buscando más crecimiento de su capital. Podría destinar su capital para una inversión de mediano-largo plazo y requerir una parte de sus recursos en algún momento.
Integral
Es el inversionista dispuesto a una mayor exposición al riesgo en el mediano y largo plazo, con el objetivo de lograr un incremento mayor de su capital. No necesariamente requiere de los recursos que invierte. Podría estar familiarizado con términos financieros complejos y ser capaz de tomar sus propias decisiones de inversión, además de considerar la asesoría de una institución financiera.
Profesional
Es el inversionista que quiere la mayor rentabilidad de sus inversiones con el más alto crecimiento posible de su capital y tiene capacidad para asumir un alto riesgo en mediano y largo plazo. No requiere disponer de su inversión a mediano plazo ni necesita los intereses que se generen. Conoce bien los mercados financieros por su experiencia en el uso de diversos instrumentos financieros. Puede tomar sus propias decisiones de inversión.