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7 maneras simples de reducir tus costos de energía en verano

Banco BASE
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5 ago 2019 · 4 min de lectura

¿Alguna vez has sentido cierto temor a que llegue el recibo de luz en temporada de calor?

Especialmente al pensar en pagar las cuentas… No se trata de un visitante indeseable, sino de la época de verano, ese lapso de tiempo en que los gastos de energía se elevan por utilizar los aparatos eléctricos que mantienen fresca tu casa y tus áreas de trabajo.

Pues el verano está aquí y con altas temperaturas que hacen sudar…y gastar. Para que no sufras por tener alto consumo de energía, puedes considerar siete acciones que te permitirán disfrutar de esta época del año sin gastar de más:

1. Que tus ventanas sean una herramienta útil

Abrir las ventanas para ventilar las habitaciones por la noche puede ayudar a disminuir el consumo de energía. Si por la noche el aire del exterior es más fresco que el del interior de tu casa, abre las ventanas. Enciende el ventilador para que la brisa se arremoline alrededor de tu habitación. No utilices el aire acondicionado si haces esto. Gastarías más energía de la necesaria.

Si aprendes más sobre la ventilación natural, también podrás ahorrar. Instala cubiertas de ventanas para evitar el aumento de calor a través de las mismas. Hay revestimientos o tratamientos que pueden mejorar la eficiencia energética de tus ventanas. ¿Lo sabías?

2. Limpia los filtros de los aires acondicionados

Muchas personas olvidan dar mantenimiento a su aire acondicionado y en ese proceso, limpiar los filtros. Seguir este consejo es sencillo y no solamente aumentará la duración del sistema de enfriamiento, sino que puede reducir la carga. Cuando los filtros están polvosos y sucios es más difícil que el sistema extraiga el aire para enfriar. Si se esfuerza para sacar el aire, trabajará más y te costará más.

Una vez limpios, no dejes tu sistema de climatización o ventiladores funcionando permanentemente. Es falsa y costosa la idea de que mantener una casa fresca cuesta menos que enfriar una caliente. Solamente enciéndelos cuando estés ahí.

3. Actualiza el termostato

¿Todavía tienes un termostato que cambias manualmente? Consigue uno programable. Contar con uno es la forma más fácil de ahorrar energía. Existen en el mercado algunos para programarse durante una semana y pueden resultar de mucha utilidad.

Si lo ajustas lo más alto posible en el verano, 22 grados centígrados en vez de 18, por ejemplo, será mejor. Se necesita la menor diferencia posible entre las temperaturas exteriores e interiores para que tus aparatos trabajen menos forzados.

Evita las lámparas o televisores cerca del termostato de aire acondicionado de tu habitación. Tal vez no lo sabes, pero el termostato detecta el calor de estos aparatos, lo que puede provocar que el aire acondicionado trabaje más.

4. Sella los espacios por donde escapa el aire

En algunas casas, el aire frío se escapa por debajo de la puerta principal, lo que genera un desperdicio de energía y dinero. Usa masilla para sellar y acaba con ese problema. También puedes usar guardapolvos para colocar en la parte baja de la puerta y que quede bien cerrada la habitación.

5. Usa el asador de tu patio

Al cocinar al aire libre, tu casa no se calienta. Si usas el horno en verano, es seguro que generarás calor a tu hogar, así que, si tienes habilidad para asar, enciende la parrilla de vez en cuando.

6. Hazte fan de los focos de bajo consumo

Si todavía no te unes a la moda ecológica, lo más recomendable es que lo hagas. Aunque podrían costar más, con las bombillas de bajo consumo puedes ahorrar mucho y bajar el gasto de energía y el calor.

7. Mata la energía “fantasma”

Otro punto de mucha importancia es que acabes con la energía “fantasma”. Evita dejar conectados aquellos aparatos que están apagados. ¿Sabías que la mayoría de estos sigue usando energía? Se cree que 13 por ciento de la factura de luz es generada por los aparatos apagados… que siguen conectados. Una opción es conectarlos a protectores contra sobre tensiones. Al girar un interruptor, se corta la alimentación de energía.

 Solamente hay una advertencia en esta acción: Si tienes un decodificador de cable, no lo apagues. Se requiere mucha energía para reiniciar de nuevo el cuadro. Solamente deja que siga corriendo.

Una forma de saber cuánto consumes en energía por aparatos enchufados es comprar un monitor de uso de electricidad Kill a Watt. Podrías conocer datos que te pondrán a ahorrar.

Entre otras consideraciones, trata de no dejar pasar el tiempo sin atender desperfectos. La mayoría de la gente espera hasta que llegue el verano para ver que necesitan reparaciones y es cuando sube el costo de las piezas debido a la demanda. Así que el próximo invierno, prepárate a reparar tus aparatos enfriadores.

 Si pones atención a estos consejos, verás que podrás tener menos gastos y disfrutar de un fresco verano.

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